El estudio de las relaciones centrífugas entre la ciudad y sus espacios circundantes ha ocupado tradicionalmente un lugar muy destacado en los escenarios teóricos y empíricos de la sociología urbana y rural. Tales relaciones, o procesos de desconcentración urbana, están generando una ingente cantidad de preguntas difíciles de responder: ¿qué tipos de periferias existen en los tramados metropolitanos actuales?, ¿cómo han
evolucionado en los últimos años los suburbios de las megaciudades?, ¿qué elementos caracterizan a los hábitats exurbanos transcontinentales?, ¿hasta qué punto los fenómenos contraurbanos han alterado las
interacciones campo-ciudad durante las pasadas décadas?
Este libro trata de proponer, mediante un análisis histórico-comparativo que comienza en la Antigüedad, un marco teórico holístico que nos ayude a comprender las complejas variables estructurales y superestructurales que vertebran los procesos de desconcentración urbana. También pretende, a través de un estudio de caso centrado en el sistema territorial español, cuestionar las visiones historicistas y unidireccionales del cambio urbano.