El socialismo internacional precisa ser orientado en el nuevo mundo, en el mundo que ha surgido después de guerra.
Me proponía tratar en una obra las nuevas realidades, las nuevas tendencias de desarrollo del capitalismo de la postguerra. Pero la tarea política diaria me obliga con tanta frecuencia a interrumpir mi trabajo teórico, que me desesperaba el no saber cuándo podría terminar la obra completa.
Por eso me he decidido a dividirla en tomos independientes.
El estudio del nuevo mundo debe comenzar con la explicación de las nuevas fuerzas y condiciones de producción, con la aplicación de aquella marcha de desarrollo que hoy está comprendida bajo la palabra racionalización. Su exposición es el objeto de este primer tomo.
El análisis del desarrollo económico y social sobre la base de la nueva técnica de producción, de los nuevos procedimientos de trabajo, de los nuevos métodos de dirección de fábricas, será tarea de los tomos siguientes.
Otro de los volúmenes que han de seguir tratará de la influencia de las nuevas normas de trabajo sobre la calificación de éste, salario, jornada, paro forzoso y organización y cultura de la clase obrera.
En relación con ello trataremos del mecanismo de los ciclos industriales, de las causas de las crisis económicas y de las transformaciones de la aparición de las coyunturas.
Otro tomo comprenderá la influencia del nuevo desarrollo técnico y económico sobre la concentración y organización del capital, sobre la organización de la agricultura, sobre las condiciones sociales del poder en el capitalismo organizado.
No se busque ni se eche de menos en este primer volumen todo lo que ha de aparecer en los tomos siguientes.