El 12 de octubre de 1936 se celebró en la Universidad de Salamanca un acto cuya amplia repercusión llega hasta hoy: en él un hombre singular alzó su fatigada voz y acabó granjeándose el título de traidor por los doa bandos enfrentados en la Guerra Civil, «los hunos y los hotros». Ese hombre se llamaba Miguel de Unamuno, había llegado a la ciudad 45 años antes, la había adoptado como suya, y desde ella lanzó a España y al mundo el grito siempre impetuoso de sus convicciones, sus angustias y sus contradicciones.
Aquel día habló en público por última vez y, aunque son muchas las versiones de lo que dijo, todas coinciden en que fue una valiente diatriba contra la sinrazón de la guerra. En este volumen se exponen todos los testimonios conservados y se concilian y articulan para ofrecer la reconstrucción más plausible de un acto programado como vistosa exaltación del llamado Alzamiento, pero que tuvo un final muy diferente del previsto.