Este libro es una crónica espléndida sobre el paso de Manuel Azaña por Cataluña, donde se retiró en1934 para alejarse de la política madrileña que había quedado en manos de la derecha tras las elecciones de 1933. Su estancia coincidió con la proclamación de la República Federal Española y el Estat Català proclamado por Lluís Companys. El recién formado gobierno de Lerroux le acusó de estar detrás de aquellos hechos y procedió a su detención. Las reflexiones de Azaña durante aquel cautiverio tienen el interés de toda su obra escrita. Insiste en que nada tenía que ver con el gesto desafiante de Companys. Azaña defendió el Estatut de Catalunya pero criticó duramente a ciertos sectores del catalanismo a los que tildó de autoritarios. Es interesante releer hoy este relato pues tiene ecos del momento actual y muestra que los problemas de hace un siglo siguen siendo casi idénticos. La obra es una reproducción facsimilar de la edición de 1935 y mantiene una estremecedora vigencia.
Mi rebelión en Barcelona
ISBN: 9788483595176
El precio original era: 15,00€.15,00€El precio actual es: 15,00€. 14,25€ IVA incluido
Hay existencias (puede reservarse)
Peso | 0,43 g |
---|---|
Fecha de edición | 01/02/2021 |
Número de Edición |
1 |
Idioma | |
Formato | |
Páginas |
364 |
Lugar de edición |
MADRID |
Colección |
TEXTOS DESATADOS CALAMBUR |
Encuadernación |
Productos relacionados
Abuelo ¿cómo habéis consentido ésto? Los graves errores que nos ha llevado a la era Trump
Abajo la Oligarquía! ¡Muera el Imperialismo Yanqui! Anhelos y Decepciones de un Antifacissta Revolucionario
Agonia de Francia
Actitud Conservadora
Alianza y Contrato. Política Etica y Religión
En los umbrales del Tercer Milenio dos parábolas siguen siendo indispensables para comprender los vínculos humanos: la de la Alianza, que se relata en el libro del «Génesis», y la de Contrato, que hizo fortuna desde el «Leviatán» de Hobbes. Cada una de ellas parece dar sentido a una forma de ser persona en el mundo moderno, la forma religiosa y la forma política, quedando la ética como un sucedáneo de una y otra para tiempos de crisis. Sin embargo, política, ética y religión siguen siendo tres dimensiones específicas del ser humano, que no pueden desenvolverse con bien si no es transmitiendo tanto el relato del pacto social como el de la alianza al hilo de las generaciones.