Enric Millo, que ha sido delegado del Gobierno en Cataluña, da cuenta —a través de su testimonio— de cuál ha sido el papel del Estado, de la Administración central, de las fuerzas y cuerpos de seguridad y de los líderes políticos del Gobierno español, así como de su partido, el Partido Popular, en estos últimos tiempos en Cataluña.
Se trata de un texto a caballo entre la memoria personal y el ensayo analítico de la situación vivida en ese período en tanto a las relaciones entre Cataluña y España. Relatado desde el mirador clave que ha ocupado el autor en estos meses, en los cuales ha jugado un papel protagonista y testigo privilegiado de los esfuerzos por evitar el choque frontal vivido, y que concluyó con la aplicación del artículo 155 de la Constitución.
Enric Millo ha mantenido contactos casi permanentes con el presidente del Gobierno de ese período, Mariano Rajoy, que lo nombró con toda intención para ese puesto. Igualmente ha mantenido una relación fluida con el presidente Puigdemont y con la mayoría de líderes políticos activos en el proceso independentista catalán, y tanto él como su familia —un aspecto muy relevante por lo que tiene de ilustrativo del clima vivido— han sufrido a menudo los efectos de la intolerancia y la estigmatización negativa con que les han marcado desde los sectores independentistas.
Prólogo
Nota previa: Mis credenciales
1. Valía la pena intentarlo
2. ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?
3. La legislatura del fraude democrático
4. Operación diálogo
5. El diálogo no fue posible
6. El rumbo de colisión
7. Golpe a la democracia
8. Un referéndum contra la democracia
9. Preparados para el impacto
10. El día D
11. Los hechos de octubre
12. Presidente, ponga las urnas
13. El artículo tabú
14. La crisis permanente
15. Perder para ganar
Epílogo: De nuevo amplio consenso: la única salida
Agradecimientos
Enric Millo (Terrasa, 1960), inició su carrera política en 1994 con la formación democristiana Unió Democràtica de Catalunya, de la que fue diputado autonómico en las legislaturas V y VI entre 1995 y 2003. En 2003 dejó la política para dedicarse a su actividad profesional privada como economista. Se unió al Partido Popular Catalán en 2006, donde ocupó el cargo de presidente provincial de Girona, diputado en el Parlament hasta 2016, siendo el portavoz del Grupo Parlamentario durante los últimos seis años y vicesecretario general de acción política en el Comité Ejecutivo del PPC. El 21 de noviembre de 2016 fue nombrado delegado del Gobierno de España en Cataluña, responsabilidad que ocupó hasta el 19 de junio de 2018. En la actualidad es el secretario general de Acción Exterior de la Consejería de la Presidencia, Administración Pública e Interior de la Junta de Andalucía.