Esta prodigiosa colección de relatos de Karen Chacek tiene la virtud escheriana de desafiar al lector con planos (im)posibles por los que se escurren sus abatidas protagonistas. Con frecuencia se recurre como estrategia narrativa al espejo laberíntico, mise en abyme por el que el personaje puede ser su mismo objeto de terror. En tal punto estos cuentos beben de lo psicológico. Hay mucho deseo detrás de cada miedo y aquí Karen Chacek ha sabido jugar a esta polaridad solapándola, además, con la de realidad e irrealidad, en un juego multinivelado cuya confección requiere de una sobrecogedora capacidad de cálculo e imaginación. Cada uno de estos relatos ha sido pensado con la minuciosidad de un extraño relojero.
Este libro es inagotable a un intento de categorización, y es por ello en sí bastante monstruoso. ¿Alguien la ha visto? es un ejercicio fantástico de escritura que pone de relieve la inherentemente insólita actividad de fabular. No se confundan con la brevedad de sus historias: cada dosis de ficción es como una pequeña bellota que contiene en sí un roble de espeso follaje. El agua que lo hace crecer prodigiosamente en cuestión de segundos es un afilado lenguaje de microcirujana.