Descripción
En mayo de 1913, a la edad de veinticuatro años, Adolf Hitler sale apresuradamente de Viena para instalarse en Múchich. Allí vivirá en una humilde buhardilla hasta agosto de 1914, estallido de la Gran Guerra y antesala de su vida política. Hitler pasó quince meses en la capital bávara como pintor de acuarelas, ratón de biblioteca y parroquiano de cafés y cervecerías. Es entonces cuando leyó uno de los libros que más le impactaron durante su época juvenil: El túnel, la famosa novela de Bernhard Kellerman sobre la construcción de un túnel transatlántico entre Europa y América. Este relato se adentra en la mente del joven Hitler a través de la novela que le tiene asombrado, lectura y símbolo premonitorio que le arrastra como un tren de carga hacia su destino .