Abarca la parte general del Derecho penal, esto es, toda aquella parte que es común y necesaria para proceder a la aplicación de los tipos penales. Constituye, pues, el fundamento esencial e imprescindible para la aplicación práctica de la norma penal. Se trata, por consiguiente, del análisis del fundamento y de lo que conforma la clave del Derecho penal.
La obra está al día e incluye todas las modificaciones legislativas, sobre todo la de gran entidad producida en el año 2015
Exposición de la materia con precisión, tomando en cuenta las diferentes opiniones de los autores y las líneas jurisprudenciales
Permite al lector tener las claves del problema, para que pueda fundar la suya
La jurisprudencia es tratada con profundidad
Destinado a expertos en derecho penal.
Prólogo a la segunda edición.
El derecho penal o, por mejor decir, el ius puniendi del Estado es también el más terrible y temible de todos los derechos, así como la ejecución. Por esa razón, en ocasiones, llama a la atención. ¿Por qué se produce esta tendencia? Hay múltiples razones que confluyen en ella, pero ahora sólo quiero referirme a una de ellas.
Tal vez la leyenda hacia el derecho penal que está produciendo es debido, al menos en parte, al funcionamiento del sistema de enjuiciamiento penal. El sistema civil está en evolución, pero todavía no hay algunos pasos. Si el sistema civil se asemejara al penal, no habría tenido que hacerlo también en el derecho penal. En este caso, no hay tiempo, sino también, en el sentido de que el sistema penal es mucho más ágil y funciona con el principio de actuación de oficio; Por eso, es preferible un sistema que el otro: no por la respuesta final, sino por el camino hasta ella.
Evidentemente, todo lo que dice nada tiene que ver con los delitos graves.
El principio de la intervención mínima –programa para el legislador y no principio del derecho penal, pues no cabe acudir a él para obtener una respuesta en los tribunales– no solo implica una menor incidencia en los bienes jurídicos, sino en los medios de enjuiciamiento para que en realidad el derecho penal queda para lo que debe quedar.
Ha pasado bastante tiempo desde la edición anterior. Es verdad que he tenido que haber ocupado con la siguiente fecha, pero otras ocupaciones me han impedido. No obstante, la reforma del Código Penal del año 2015 ya ha sido una prueba de que no se ha podido leer más.
En ella se cuida de la normativa se encuentra al día; Esto es, atender a las modificaciones legislativas. Asimismo, se han introducido los comentarios necesarios. Puntualmente también se ha dado a conocer otras ciertas modificaciones de la era ineludible.
Por último, él de agradecer la ayuda prestada por mi discípulo Jaime Requena Juliani en la puesta al día de las partes del presente libro.