Thomas Hobbes: la fundación del estado moderno
La cuestión fundamental es cómo una multitud puede convertirse en una persona civil única. Hobbes es un pensador ineludible porque explicita el mecanismo constitutivo del artificio que es todo orden político como artefacto humano, orden que resultará más o menos adecuado si sabe establecer la obediencia a la ley de modo que garantice la seguridad y la paz suficientemente como para que la libertad y el bienestar sean posibles. El cálculo de la voluntad racional humana compartida es capaz de generar el instrumento o aparato político que supera, incorporándola en su seno, la dinámica propia de las asociaciones naturales de beneficios y afectos mutuos particulares, las cuales ven peligrar su existencia en la lucha a muerte por la supervivencia. En Hobbes todos somos iguales en las inclinaciones fundamentales que son de nuestro interés absoluto, hasta el punto de que no está garantizado el respeto a las reglas de convivencia elementales. De ahí resultará la institución de una república, Commonwealth o Leviatán.