¿Hacia dónde nos dirigimos tras la crisis sanitaria global? ¿Es posible trazar un sistema democrático que supere los límites del liberalismo imperante?
La pandemia de la COVID-19 que asola el mundo entero, pero en especial los países occidentales, se ha convertido rápidamente en un factor decisivo para las transformaciones en las relaciones sociedad-Estado. Esta crisis sanitaria sin precedentes y de magnitud inesperada ha puesto de manifiesto más que nunca el carácter contingente de nuestras sociedades: el momento actual se caracteriza por la inestabilidad y la incertidumbre ante un futuro de posibilidades desconocidas. En este escenario, el modelo de Estado y de gobernanza de cada país ha sido decisivo para la gestión de la pandemia y su evolución. El coronavirus ha traído consigo nuevas medidas de vigilancia y control poblacional, que no es previsible que desaparezcan próximamente, sino que tenderán a normalizarse en el futuro, afianzando una tendencia ya existente antes de la llegada de la pandemia.
Desde el enfoque de la complejidad y la óptica de los sistemas, este libro tiene como objetivo identificar las tendencias de cambio en las relaciones entre Estado y sociedad como consecuencia de la crisis sanitaria global e invitarnos a plantear las preguntas: ¿hacia dónde nos dirigimos?, ¿qué tipo de sociedad queremos?, y ¿es posible trazar un sistema democrático que supere los límites y disfunciones del liberalismo imperante?