La impugnación penal en España es el fruto de un reiterado parcheo legislativo, triste deudor de una Ley de Enjuiciamiento Criminal, promulgada en 1982, que adoptó el sistema de instancia única.
Hoy día afrontamos un conjunto heterogéneo de recursos jurisdiccionales que complica todavía más su comprensión, a causa de la diversidad de órganos judiciales en el orden penal.
Esta obra trata de extraer los componentes indispensables del recurso en el enjuiciamiento criminal, ofreciendo vías de solución a los problemas que en la práctica se suscitan, y con ello contribuir al debate dogmático de una muy necesitada reforma procesal penal, tanto orgánica como sustantiva.
La impugnación penal en España es el fruto de un reiterado parcheo legislativo, triste deudor de una Ley de Enjuiciamiento Criminal, promulgada en 1982, que adoptó el sistema de instancia única.
Hoy día afrontamos un conjunto heterogéneo de recursos jurisdiccionales que complica todavía más su comprensión, a causa de la diversidad de órganos judiciales en el orden penal.
Esta obra trata de extraer los componentes indispensables del recurso en el enjuiciamiento criminal, ofreciendo vías de solución a los problemas que en la práctica se suscitan, y con ello contribuir al debate dogmático de una muy necesitada reforma procesal penal, tanto orgánica como sustantiva.