La universal obra teatral Cyrano de Bergerac (París, 1897), de indudable belleza estética, está compuesta por un total de 2.570 versos (de los que 1.400 versos corresponden al personaje de Cyrano) y se dispone en pareados de alejandrinos, alternando las rimas según los cánones del teatro clásico y romántico francés. Además de ser una de las obras más representadas en el mundo, se ha traducido a numerosos idiomas: español, inglés, ruso, japonés, etc. La primera versión cinematográfica, realizada en 1900 en cine mudo, la protagonizó Coquelin, actor que interpretó a Cyrano en el estreno teatral. En 1990, Jean-Paul Rappeneau inmortalizó la historia a través de la gran pantalla, con Gérard Depardieu como protagonista.
Resulta de interés para la traducción audiovisual, y más en concreto para el doblaje, la dificultad para mantener en el trasvase lingüístico la idiosincrasia del verso y rima de la obra teatral original y de la versión cinematográfica dirigida por Jean-Paul Rappeneau. El análisis lingüístico de la obra audiovisual en su totalidad, según el tipo y procedimientos de traducción utilizados y teniendo en cuenta las modificaciones discursivas y pragmáticas de la fase de traducción en el doblaje del francés a español, arroja interesantes resultados desde el punto de vista de la traducción. En cuanto al proceso del doblaje, uno de los problemas más interesantes que se plantean es el del trasvase de la voz. El estudio de cómo se produce la voz desde el punto de vista fisiológico y sus cualidades, intensidad, duración, timbre y tono, es fundamental para comprobar que, desde la perspectiva científica, dichas cualidades son las que provocan una sensación determinada y subjetiva en el ser humano. El hecho de conocer cómo afecta cada cualidad de la voz a la hora de transmitir diferentes emociones es de gran utilidad en el terreno cinematográfico, ya que permite al director, tanto de la película original como del doblaje, seleccionar determinadas voces con la finalidad de crear en el espectador origen y meta una imagen determinada y sugerir así diferentes sensaciones.