Este libro ha sido escrito para una especie particular de sociedad: una sociedad pacífica, opulenta e ignorante, pero que aspira a la racionalidad. Lo bastante pacífica, de todos modos, para mantener el orden sin necesidad de tropas. Lo bastante opulenta para dedicar una gran cantidad de dinero y personal altamente preparado para manejara los criminales. Lo bastante ignorante para verse forzada a confiar en la superstición más que en la ciencia para la utilización de estos recursos; pero lo bastante racional, o enamorada de lo racional, para sentir la necesidad de obtener más conocimientos científicos para reemplazar la superstición. Y también lo bastante racional para querer saber cómo enfocar el problema de hacer justicia entretanto, mientras se obtienen más conocimientos científicos; en otras palabras, una sociedad que considera razonable preguntar: «¿Qué actitud racional asumir mientras sabemos más’?».
El tema del libro es un sistema penal. No es sobre técnicas de tratamiento penal, ni siquiera sobre alternativas al tratamiento penal. Alguien que desee saber cómo supervisar a un delincuente en libertad condicional, manejar una prisión o sociabilizar psicópatas no hallará aquí la respuesta. Ni discute tampoco el libro explicaciones del comportamiento criminal. No estoy despreciando los libros sobre estos temas, aunque creo que hacen falta avances importantes, tanto conceptuales como técnicos, antes de que puedan ser de mucha utilidad práctica. Lo que este libro trata de estudiar son los aspectos sistemáticos de nuestro enfoque del problema del crimen: es decir, sus objetivos y presunciones, las decisiones que exige, la gente que tiene la tarea de tomarlas, y las consideraciones que deben tener en mientes.
Capítulo I. Los objetivos de un sistema penal
Capítulo II. Ámbito de la ley penal
Capítulo III. Técnicas de la reducción del crimen
Capítulo IV. Disuasión general
Capítulo V. Medidas correctivas
Capítulo VI. La eficacia de los correctivos
Capítulo VII. Diagnóstico e investigación social
Capítulo VIII. El enfoque estratégico
Capítulo IX. Presunciones del sistema de sentenciar
Capítulo X. Protección de la sociedad
Capítulo XI. Control de los jueces
Capítulo XII. Mitigación y exención
Capítulo XIII. El delincuente juvenil
Capítulo XIV. Algunos problemas residuales
Apéndice A
Apéndice B
Apéndice C
Nigel Walker (Inglaterra)
(6 de agosto de 1917 — 13 de septiembre de 2014)
Fue profesor de criminología en el King’s College de Cambridge.
Asistió a la Academia de Edimburgo y se graduó en 1935.
Durante la Segunda Guerra Mundial, sirvió con los Cameron Highlanders y Lovat Scouts de la Reina, y recibió un disparo en servicio activo en Italia.
Durante su tiempo en Escocia, obtuvo un PhD (1954) en la Universidad de Edimburgo por su tesis sobre El estado lógico del inconsciente fi-eudiano y publicó un libro A Short Histoiy of Psychotherapy. Posteriormente, ganó una beca por un año para funcionarios públicos en Nuffield College, Oxford, publicando el libro Moral in the Civil Service (1961). Publicó también una historia de la defensa de la locura, Crime and Insanity in England (1968). Su libro Crime and Punish-ment in Britain fue muy influyente.
Entre 1973 y 1984 fue profesor de criminología en Wolfson y miembro del King’s College de Cambridge. Su trabajo desafió muchas creencias aceptadas en el estudio de la criminología, y tenía interés en la rehabilitación de los delincuentes, escribiendo Sentencing in a Rational Society (1969). Se retiró en 1984, pero continuó enseñando y escribiendo, en particular Why Punish? (1991) and Dangerous People (1996)
Durante su carrera docente, pasó un tiempo en la Universidad de Yale, donde sus estudiantes incluyeron a Bill Clinton y Hillary Clinton, que aún no estaban casados.