La convivencia en sociedades multiculturales complejas se ha convertido en uno de los retos más trascendentes en las ciudades de este incipiente siglo XXI. Para conseguir este objetivo es condición indispensable que exista un razonable clima de seguridad y libertad, además de reducir, en la medida de lo posible, uno de los fenómenos que de forma más notable contribuyen al deterioro de la convivencia: el miedo.
En esta Guía de Prevención del Delito, -de gran interés para todos los profesionales de la seguridad: criminólogos/as, policías y técnicos con responsabilidades en materia de seguridad local, – se presenta un estructurado y exhaustivo compendio de acciones y estrategias de diagnóstico e intervención orientadas al fomento de la seguridad, entendida ésta, no solo como la reducción, o incluso ausencia, de actividad delictiva, sino como un proceso de mejora continua de la calidad de vida de la ciudadanía. En dicho proceso, la participación social y el desarrollo de nuevos modelos de acción policial se presentan como dos elementos irrenunciables para el éxito en la prevención del delito.