En el presente ensayo, el autor investiga, desde las diferentes ópticas que proporciona el corpus epistémico de la Escuela Austriaca de Economía, la idea original que Gustavo de Molinari plasmara, en 1849, en su artículo «Sobre la producción de seguridad»; a saber, que los servicios de defensa y seguridad, al igual que el resto de bienes económicos, se producen con mayor eficacia en el libre mercado que bajo un régimen de monopolio público, y que no existe razón alguna por la que el Estado deba acaparar de forma exclusiva los servicios de protección.
Hernández Cabrera investiga si el Estado, como productor monopolístico de la violencia, es un eficaz proveedor de protección o si, por el contrario, actúa como cualquier monopolio: reduciendo la cantidad y calidad de servicio producido y aumentando su precio unitario. Sus herramientas de análisis son: subjetivismo, marginalismo, preferencia temporal, cálculo económico y función empresarial, teoría austriaca del monopolio; todo ello empleando el individualismo metodológico y el deductivismo lógico.
Este análisis se complementa con la ética y la prospectiva. Con la primera, el autor cuestiona la legitimidad del Estado para forzar a los ciudadanos a participar en la guerra, financiarla o a impedirles contratar su seguridad con terceros. Con la segunda, el autor especula sobre la factibilidad del advenimiento de un orden social completamente libre de coacción: el anarcocapitalismo.