Una precuela de las monografías anteriores del autor sobre la Gran Guerra y las causas de la Guerra Civil Española, este libro analiza el difícil desafío y a menudo violento camino hacia la modernidad. Durante los casi 30 años analizados (1892-1921), España parecía estar atrapada en una especie de Groundhog Day (Día de la Marmota). En la última década del Siglo XIX el país tuvo que enfrentarse a una mortífera guerra colonial y al círculo vicioso de terrorismo y represión brutal dirigida por oficiales del ejército, principalmente en Barcelona, que culminó con el asesinato del primer ministro conservador, Antonio Cánovas, en agosto de 1897. Casi un cuarto de siglo más tarde, España se veía de nuevo convulsionada por un conjunto similar de circunstancias: un conflicto imperialista en Marruecos y un nuevo ciclo de brutal lucha social, con su epicentro en la ciudad condal, que culminó de nuevo en el asesinato de otro primer ministro conservador, Eduardo Dato, en marzo de 1921. El marco cronológico en que se desarrolla el objeto de estudio de este libro revela la crisis, pero también la resiliencia, de la monarquía de la Restauración. Francisco J. Romero Salvadó defiende la tesis de que tanto la crisis como la resiliencia del régimen puede explicarse en gran medida examinando la correlación entre dos términos conceptuales aparentemente contradictorios, pero que de hecho resultaron ser complementarios: la persistencia de una comedia política por parte del orden político gobernante, liberal pero oligárquico, perpetuó una tragedia social que acabo destruyendo al régimen.
Este estudio rechaza cualquier noción de determinismo o excepcionalismo. Por el contrario, persigue demostrar que España no fue un caso extraordinario dentro del contexto europeo, sino que constituyó un laboratorio por excelencia de la agitación que marcó esta época; un período decisivo de rápido progreso tecnológico, modernización económica y cultural que gradualmente transformaron a los diferentes regímenes vigentes, en anacronismos cuya hegemonía socio-política se veía en peligro ante el imparable avance de la sociedad y política de masas. El resultado, evidente tras la Primera Guerra Mundial, fue el estallido de una guerra civil europea que en muchos casos facilitó el establecimiento de fórmulas autoritarias de gobierno.