Prólogo. En defensa propia
Introducción
Capítulo primero
Los motivos del lobo
1.1. Lo que somos
A. ¿Por qué somos así?
B. El sentido común no es tan común
C. Pensamos poco o pensamos demasiado
D. No sabemos lo que queremos
E. No recordamos lo que olvidamos
1.2. Lo que nos gobierna
A. Nuestras circunstancias
B. La sensibilidad aflora y manda
C. La tiranía de los prejuicios
D. La individualidad gana terreno a los buenos modales
E. Amor y sexo: juntos y revueltos
Capítulo segundo
Las malas compañías de la manada
2.1. Por sus huellas y aullidos los reconoceréis
A. Las personas tóxicas no se anuncian
B. Lo que hacen a los otros te lo harán a ti
C. Frases sutilmente peligrosas
D. Frases sencillamente molestas
E. Caerse del nido
2.2. Bestiario alfabético de las malas compañías
Agoreros: cambiad el rollo
Aprovechados insaciables: ¡al cuerno!
Bárbaros: cuanto más lejos, mejor
Casanovas seductores, ni hablar
Cerdos anónimos: apestáis
Cínicos: pasad de largo
Coachers: a dar la turra a otro
Difamadores: indiferencia y paciencia
Discutidores compulsivos: me callo
Envidiosos: no os envidio
Esotéricos: seamos serios
Estúpidos: os discrimino por razón de seso
Fanáticos: reparad vuestra caja negra
Fantasmas de carne y hueso: desvaneceos
Groseros: al paredón
Hipócritas: no os soporto
Iletrados: comenzad por la ortografía
Impertinentes: no seré melodramático
Impostores: no me engañareis
Ingratos con la vida: no la merecéis
Intolerantes: no os tolero
Ladrones de tiempo: no molestéis
Listillos: no os paséis
Maleducados: sobráis
Malhumorados: no, gracias
Manipuladores: alerta máxima
Mendigos hostiles: ni hablar
Malos samaritanos: paso de largo ante vosotros
Mentirosos mediáticos: ni lo intentéis
Mezquinos: ¡qué solos estáis!
Pelmazo a la vista: ¡al refugio!
Políticos malos: ¡vaya lacra!
Protagonistas de First Dates: ¿de qué planeta venís?
Psicópatas anónimos: ¡al carajo!
Repulsivos: alejaos
Resentidos: os comprendo
Retrógrados: ¡dejad paso libre!
Soberbios: si vais de sobrados, me sobráis
Rompehuevos: agotáis la paciencia
Simplones: poneros las pilas
Televendedores: adiós
Testarudos: no podréis conmigo
Tibios y cobardes: no os molestéis en acompañarme
Tontos taimados: no os quiero cerca
Tóxicos: ¡a tomar viento!
Traidores: ¡alejaos de mí!
Tramposos: no me engañaréis
Vecinos extraños: mudaros al infierno
Violentos: no habrá paz para vosotros
Zalameros: ¡qué rastreros sois!
Capítulo tercero
Brújula vital del lobo o loba alfa
3.1. Conócete a ti mismo
A. Valemos lo que nuestros valores
B. Juzgarse a sí mismo bajo la ley del espejo
C. No somos perfectos: aceptémoslo
D. No somos eternos: las rosas se marchitan
E. No somos dueños del mundo
3.2. Fija tus propias metas
A. El espejismo del carpe diem
B. Lo que realmente importa
C. No resignarse al destino
D. Elegir la versión de nuestra vida
E. Porque me da la gana
3.3. Piensa por tí mismo
A. Someter a sana crítica lo que se da por verdadero
B. Pensar en positivo
C. Fomentar la curiosidad intelectual
D. Sortear las trampas mentales
E. Salvaguardar la imaginación de los idus tecnológicos
3.4. Ser fiel a sí mismo
A. Prudencia
B. Paciencia
C. Voluntad
D. Autenticidad
E. Responsabilidad
F. Congruencia: decir «no»
3.5. Apartar los malos hábitos
A. No desentonar
B. No dejarnos llevar por la ira
C. No hablar de temas tabú
D. No asumir riesgos estúpidos
E. No descuidar la salud
F. Más lento sabe mejor