Esta monografía tiene como objetivo poner de relieve la dificultad de hablar de derechos sociales en el espacio jurídico europeo, entendiendo por tales, aquellos derechos adscritos al Estado Social. Frente a las crecientes demandas por dotar a la Unión de mayores prerrogativas sociales como consecuencia de la crisis sistémica del paradigma globalizador, las coordenadas constitucionales del modelo jurídico político europeo sitúan a la dimensión social transnacional en un espacio marginal y subalterno incapaz de condicionar los imperativos inherentes a la centralidad del mercado.
En este constitucionalismo de mercado europeo, los derechos sociales adquieren un significado diverso al del constitucionalismo social. La autonomía del mercado demanda derechos sociales funcionales al mercado, derechos que se configuran en torno a los condicionantes de mercado y la solidaridad competitiva.