De la bioética a la biojurídica: el principialismo y sus alternativas

El principialismo norteamericano es el modelo teórico predominante en la bioética occidental contemporánea. A partir de sus postulados se han elaborado las respuestas a los principales problemas bioéticos que generalmente son tenidas por válidas. A grandes rasgos, el Derecho español presupone esta doctrina y los operadores jurídicos la emplean en mayor o menor medida en la interpretación y aplicación de las normas. Este vínculo hace preciso exponer las características y fundamentos del principialismo, las críticas que afronta, la reformulación de que ha sido objeto a fin de superarlas y, por último, los modelos presentados como sus posibles alternativas.
Tal labor resulta útil debido a que buena parte de las normas positivas vigentes fueron promulgadas en un momento en el que el principialismo era un paradigma bioético aceptado de forma generalizada y sin fisuras. Hoy por hoy, las nuevas orientaciones abiertas en el seno de la disciplina han dado lugar a una línea crítica que cuestiona no sólo su operatividad práctica, sino su propio marco epistemológico. En el ámbito del Derecho, ello hace exigible la revisión de las interpretaciones y aplicaciones de las normas de corte principialista.
Sin un conocimiento siquiera mínimo del principialismo, sus limitaciones y reformulaciones, así como de los otros modelos elaborados con la intención de reemplazarlo, difícilmente serán posibles la crítica extrasistemática y contextual a las normas positivas, su reinterpretación o modificación. Comprender su evolución permite, además, responder a otra cuestión de mayor alcance: si, ya no sólo el principialismo, sino más ampliamente, la visión bioética de los problemas relacionados con la práctica de la medicina clínica y las ciencias de la vida necesita ser reemplazada por un marco de aproximación o referente distinto, basado en otros puntos de partida. Esta obra pretende contribuir a la reflexión en ambos sentidos.
La exposición de la orientación principialista es llevada a cabo desde una perspectiva diacrónica. Conforme a ella, los planteamientos iniciales del modelo y su crítica son abordados en primer lugar (capítulo I). Luego se desarrollan otras orientaciones de carácter también principialista (capítulo II) y se exponen tanto los modelos alternativos al principialismo (capítulo III) como las demás orientaciones bioéticas existentes (capítulo IV). Sólo después se vuelve sobre la forma en que el principialismo norteamericano les ha hecho frente, reformulando algunos de sus planteamientos iniciales (capítulo V). Este tipo de exposición obliga a realizar un recorrido más extenso. A cambio, permite advertir las reformulaciones del modelo inicial, a la vez que pone de manifiesto no sólo las dificultades que afronta la propia orientación bioética (capítulo VI), sino también la necesidad adoptar una nueva perspectiva para la materia (capítulo VII).