Estatuto del Trabajo Autónomo
La figura del trabajador autónomo es un elemento esencial en la configuración actual de la economía de mercado en nuestro país. Las cifras al respecto no pueden ser más elocuentes. A junio de 2006 existían más de tres millones trescientas mil personas afiliadas a la Seguridad Social como trabajadores por cuenta propia, de los cuales más de dos millones realizaban actividades profesionales en los distintos sectores económicos. Fruto de la importancia de este sector de la actividad laboral ha sido la aprobación, en julio de 2007, de una Ley llamada a regular, por primera vez, todos los aspectos que abarca el trabajo del autónomo. Se justifica la norma por la necesidad de actualizar, unificar y redefinir la figura del trabajador autónomo de nuestros días, un colectivo que prolifera en países de elevado nivel de renta y en el que, junto a la figura de lo que se podría denominar «autónomo clásico», esto es, el titular de un establecimiento comercial, agricultor y profesionales diversos, aparecen otras figuras tan heterogéneas como los emprendedores, personas que se encuentran en una fase inicial y de despegue de una actividad económica o profesional, los autónomos económicamente dependientes, los socios trabajadores de cooperativas y sociedades laborales o los administradores de sociedades mercantiles que poseen el control efectivo de las mismas, por citar algunos ejemplos. El objeto de la obra es el estudio en profundidad del régimen jurídico del trabajador autónomo, que engloba la definición de este colectivo, el conjunto de derechos y obligaciones, su nivel de protección social, las relaciones laborales y política de fomento del empleo autónomo, así como la figura del trabajador autónomo económicamente dependiente.