El presente trabajo estudia cómo a lo largo de los siglos XIX y XX se fue configurando la idea de que las penas privativas de libertad habían de servir para que el penado buscara y encontrara la corrección, a través del arrepentimiento, fundamento de un incipiente tratamiento, con miras a ser capaz de vivir respetando la ley penal.
La obra contiene la más autorizada aproximación al desarrollo del tratamiento correccional, desde sus inicios, a través de los primitivos órganos unipersonales, empleados de establecimientos penales de la época, mediante la recopilación sistemática de las disposiciones penitenciarias, progresión de las ideas del legislador o del gobierno, que establecían la política de la ejecución penal.
Con este trabajo el autor continúa ofreciendo al lector su inigualable visión de nuestros antecedentes históricos, centrados esta vez en uno de los pilares de la institución penitenciaria, y la función legal que animaba la labor de aquellos funcionarios en los centros de reclusión.