«Este libro no es un libro científico, aunque toca temas científicos y tecnológicos. Está escrito en primera persona, lo que significa que presenta mis visiones personales «y mis prejuicios». Lo he escrito para la «gente real», si bien puede que el profesorado y los estudiantes universitarios hallen interesantes algunas de sus partes. Pero no requiere ningún conocimiento previo de psicología académica, aunque los primeros capítulos tocan algunos de sus temas. Tampoco es un libro del tipo «hágalo usted mismo». Si hay un modo de describir su contenido, yo diría que trata de la filosofía de la administración de sistemas complejos de alta peligrosidad. Filosofía es una palabra abrumadora, pero aquí significa simplemente un modo de pensar sobre estos temas.
En una frase, es un modo de encarar los problemas que conlleva dirigir una operación de alta peligrosidad de modo que se mantengan los riesgos tan bajos como sea razonablemente factible sin dejar de ser económicamente viable. Este último doble imperativo es, para mí, el más importante».