Espía y traidor. La mayor historia de espionaje de la Guerra Fría
En una cálida tarde de julio de 1985, un hombre de mediana edad está en la acera de una concurrida avenida del corazón de Moscú, sosteniendo una bolsa de plástico. Con su traje gris y su corbata, se parece a cualquier otro ciudadano soviético; solo la bolsa llama ligeramente la atención por el logotipo rojo de Safeway, un supermercado británico.
El hombre era un espía del MI6. Un coronel del KGB que, durante más de una década, había proporcionado a los espías británicos secretos de gran valor procedentes de las profundidades de la máquina de inteligencia soviética: ningún otro espía había hecho más para dañar al KGB. Y la bolsa de Safeway era una señal: activar su plan de escape para que le sacaran de la Rusia soviética.
Así comenzó uno de los episodios más audaces y extraordinarios en la historia del espionaje, cuando Oleg Gordievski consiguió evitar que en 1985 se desencadenase un holocausto atómico. En Espía y traidor, Ben Macintyre revela una historia de traición, duplicidad y coraje que cambió el curso de la Guerra Fría para siempre.
Ben Macintyre, maestro de la literatura de espionaje, consigue en esta ocasión, gracias a disponer de información privilegiada, ofrecernos una imagen real de la actuación de los servicios secretos durante la Guerra Fría. Pero su libro es también la historia de un hombre que hubo de asumir decisiones difíciles y que vivió en un constante riesgo de muerte: una historia con la que Macintyre consigue emocionarnos.