La situación financiera de los municipios se ha visto notablemente afectada por la crisis económica y por ello la efi cacia en la gestión tributaria se convierte en un factor determinante para resolver sus problemas actuales. De aquí la importancia que cobra la gestión de los tributos propios y precisamente donde acaba la norma comienza la aplicación práctica de los tributos, por eso la multiplicidad de procedimientos exige a los Ayuntamientos dotarse de una estructura administrativa para responder a esta compleja circunstancia.
Este libro trata de dar una respuesta concreta a esa problemática, partiendo de una experiencia en la implementación de un proyecto de modernización en el que ha primado la consecución de una Administración pública efi ciente y ágil en la resolución de las demandas de los administrados, donde prima la implantación de una administración electrónica y se da cumplimiento al principio de interoperabilidad entre las diferentes administraciones. Al mismo tiempo, se propone una administración tributaria transparente que pone en práctica políticas de calidad.
Los resultados obtenidos, expuestos de forma breve pero concluyente, pueden ser de utilidad para quienes estudian y ponen en práctica la aplicación de los tributos municipales.