La complejidad diagnóstica y terapéutica, la variabilidad de los casos clínicos y el respeto de los aspectos éticos y legales inherentes al ejercicio de la medicina suponen un reto para el profesional sanitario, especialmente grave si conlleva la adopción de decisiones difíciles que pueden derivar en secuelas para el paciente o incluso en su fallecimiento.
En ese contexto, el paciente es titular del derecho a la información y, el facultativo que le atiende, el responsable de garantizársela, con obligación de transmitirle todo aquello que concierne a su salud y a las actuaciones que pretende realizar. A todo ello se refiere la presente obra, cuyo tema central lo conforman las cuestiones actuales del consentimiento informado y de la responsabilidad en el ámbito sanitario.