La publicidad, que debe prescindir del adjetivo «comercial», es sometida a múltiples restricciones y limitaciones sujetas a control de constitucionalidad.
Para que esta evaluación transcienda de la ocurrencia, más o menos argumentada, requiere de unos fundamentos constitucionales que permitan ofrecer respuestas dotadas de coherencia, razonabilidad y seguridad jurídica. Con esta finalidad se analizan los ordenamientos de EEUU, Italia, Canadá, Reino Unido, así como la jurisprudencia del TEDH y del TJUE.
Con estos presupuestos se obtiene un concepto de publicidad que encuentra, predominantemente, amparo en las libertades del artículo 20, sus conexiones sistemáticas con otros preceptos constitucionales amplían o limitan estos mensajes, así el 38, 51 o 18, por citar los más relevantes.
Libro imprescindible no sólo para constitucionalistas, civilistas y mercantilistas sino también para estudiosos del marketing y la publicidad, así como para abogados y prácticos del Derecho.