El autor orienta su investigación hacia la dimensión jurídica del Santo Oficio, un ámbito menos explorado, más acorde con nuestra especialización y, en definitiva, perfectamente adecuado para analizar un organismo que, al fin y al cabo, fue concebido y creado con la finalidad de administrar justicia en el que los juristas y teólogos europeos del Antiguo Régimen consideraron el más grave de los delitos.
El lector puede advertir en los distintos títulos que el libro ofrece cómo aparece siempre ese denominador común: la preocupación por mostrar las actividades de la Inquisición desde el punto de vista jurídico. A todos los recorre, como un leitmotiv, el examen de las fuentes normativas y de su aplica-ción en la vida diaria (las Instrucciones y Cartas Acordadas, la costumbre y las sen-tencias, elementos convergentes en la formación del llamado “estilo judicial” del Santo Oficio). Y la utilización exhaustiva de la doctrina de los tratadistas que las interpreta y las desarrolla, un género de obras excluidas del comercio, de circulación restringida para el exclusivo uso de inquisidores y oficiales del secreto, producidas por autores de sólida formación jurídica que, avezados en la práctica procesal penal de sus tribunales, vierten enseñanzas, razonamientos y consejos, y aportan sus experiencias para instruir a los colegas menos expertos en el modo de arrostrar las dificultades y las dudas con que puedan tropezar en el ejercicio cotidiano de su función.
El análisis de estas reflexiones, expresadas con la franqueza que les propor-cionaba la tranquilidad de saber que sólo ojos autorizados tendrían acceso a ellas, permite a quien las examina penetrar en los arcanos de la institución. E instalado de este modo en las interioridades mismas del secreto, el autor dispone de las claves a partir de las cuales le es posible comprender (y explicar), desde las autorizadas consideraciones que la elite de los ministros del tribunal pone a su alcance, el cómo y el porqué de las directrices que presidieron el funcionamiento del Santo Oficio.