La globalización económica primero, y la social y cultural después, han supuesto una radical transformación de la sociedad contemporánea, y también del crimen como una de las posibles manifestaciones de la conducta humana. Uno de los paradigmas de la criminalidad actual viene, pues, constituido por la criminalidad organizada transnacional, que ha dejado de integrar una forma excepcional de delinquir para convertirse en una forma mucho más cotidiana de ejecución de conductas criminales.
En tal contexto, cuestiones como la suficiencia de los instrumentos jurídicos-penales con que contamos para hacer frente a este tipo de criminalidad, las especificidades de la victimización propia de la misma, la adecuación de los mecanismos de protección y asistencia a las víctimas de esta clase de delitos, así como la completitud de la respuesta normativo-aplicativa a manifestaciones contemporáneas en expansión de este fenómeno como la trata de seres humanos deben ser abordadas. Esta obra pretende ofrecer respuestas reflexionadas a algunos de estos interrogantes.