Siempre hay un niño que pregunta: «¿Cómo se inventan las historias?», y se merece una respuesta honesta. En la Gramática de la fantasía «se habla de algunos modos de inventar historias para niños y de ayudar a los niños a inventar por sí solos sus propias historias». Este libro, que se ha convertido ya en un clásico de la literatura pedagógica, es un instrumento realmente útil destinado a «quien cree en la necesidad de que la imaginación tenga su puesto en la enseñanza».