Las Cortes y los Héroes
Desde su instalación en Cádiz en 1810 hasta la Segunda República, las Cortes honraron a los que se señalaron en la lucha por la libertad de la nación y por las libertades de sus ciudadanos con la inscripción de sus nombres en letras doradas en el salón de sesiones. Daoiz, Riego, Torrijos, el Empecinado, Palafox, Prim, Canalejas, Martínez Campos, García Hernández… Un total de cuarenta y cuatro protagonistas de nuestra historia alcanzaron la máxima distinción otorgada por las Cortes: treinta a título individual -entre ellos una única mujer, Mariana de Pineda-, y catorce de forma colectiva como firmantes del proyecto de la Constitución de 1812.
Tras la Guerra Civil, en un intento de borrar la memoria de las Cortes liberales y democráticas, todas las inscripciones fueron eliminadas. En la actualidad solo se conservan dos cartelas, cada una de ellas con seis nombres inscritos que salieron a la luz en 1986 durante unas labores de restauración.
En un recorrido por nuestra historia política y parlamentaria, las autoras recuperan la memoria de aquellos héroes y beneméritos de la patria, destacando su humanidad y las acciones que los hicieron acreedores de la gratitud de las Cortes.