Tito
Sólo un hombre de extraordinaria talla podría emprender la tarea hercúlea de unificar a su país bajo la bandera de la liberación. En la Yugoslavia de 1941, ese hombre era Tito. con la invasión nazi de la Unión Soviética surgiría en él la esperanza de cooperar con Rusia, y cobraría forma su visión de libertad, igualdad y fraternidad para todas las naciones de Yugoslavia.