Al igual que el ciudadano de la Antigüedad, el hombre y la mujer modernos precisan aprender a argumentar para convencer a su interlocutor y a su público, tanto en su vida profesional, como en su vida personal. Este manual práctico se inspira directamente en las técnicas elaboradas por la retórica griega y romana. Ésta última poseía dos preocupaciones indisociables, la de la eficacia y la de la ética.
Esta obra, que retoma la experiencia del autor en calidad de formador en argumentación, está construida en torno a varias decenas de ejemplos que abordan los grandes principios del convencer y desarrolla paso a paso el «protocolo de preparación de la argumentación» para alcanzar sus objetivos. El libro concluye con algunos consejos en cuanto a la toma de palabra, la elocución y la memorización se refiere.