El libro examina en la Primer Parte la relación del nacionalismo con las ideologías políticas contemporáneas con las que habitualmente convive en el Estado Constitucional, constatándose la «doble alma» intelectual que aquellas ideologías muestran cuando abordan la cuestión nacional: así, en el conservadurismo (conservadurismo nacional y ultraconservadurismo), en el liberalismo (liberalismo jacobino y liberalismo pluralista) y en la izquierda (socialdemocracia nacional y marxismo ortodoxo).
En la Segunda Parte, el texto afronta cómo es en general la relación del nacionalismo con la cultura constitucional y las «debilidades» potenciales que aquí es susceptible de mostrar. Abordando, asimismo, cuáles son los dos principales «modelos de gestión» (de los nacionalismos) que en este asunto puede ofrecer el Estado Constitucional: el (tradicional) «modelo regulativo» y (el más novedoso) «modelo desregulativo» de los hechos nacionales.