El presente trabajo constituye un estudio riguroso y exhaustivo de dos materias que revisten un especial interés en el sistema procesal diseñado por la Ley de Enjuiciamiento Civil de 2000.
De un lado, se estudian las llamadas «cuestiones procesales», es decir, las posibles incidencias que pueden plantearse en diversos momentos del proceso en relación con aspectos que afectan al proceso en sí, a los requisitos y presupuestos que condicionan que aquél pueda desarrollarse válidamente y concluir con sentencia sobre el fondo (así, los requisitos de admisibilidad de la demanda, los relativos a la jurisdicción y competencia del tribunal, las cualidades con que han de comparecer las partes o los requisitos de la acumulación de acciones, entre otras). Son cuestiones que se plantean con gran frecuencia en la práctica y que en este trabajo se estudian de forma sistemática e individualizada, con especial atención al tratamiento procesal, esto es, a la forma de poner de relieve eventuales defectos procesales y a la forma de subsanarlos o de reaccionar en caso de que no sea posible la corrección.