Discursos sobre el colonialismo
Una civilización que se muestra incapaz de resolver los problemas que ella misma
crea es una civilización decadente.
Una civilización que decide hacer la vista gorda ante sus problemas más cruciale
s es una civilización en apuros.
Una civilización que juega con sus principios es una civilización moribunda.
El hecho es que la civilización llamada «europea», la civilización “occidental»,
tal como ha sido modelada por dos siglos de dominación burguesa, es incapaz
de resolver los dos grandes problemas a los que ha dado lugar su existencia:
el problema del proletariado y el problema colonial; que, sometida a la prueba
de la «razón» y de la «conciencia”, esta Europa es impotente para justificarse;
y que, cada vez más, se refugia en una hipocresía tanto más odiosa cuanto que
tiene cada vez menos posibilidades de engañar. Europa es indefendible.
Al parecer, esto es lo que se dicen entre sí los estrategas estadounidenses.
Eso en sí mismo no es grave.
Lo grave es que «Europa» es moral y espiritualmente indefendible.
AUTOR:
Aimé Césaire
El segundo de siete hijos, su padre era cobrador de impuestos y su madre ama de casa.
Su abuelo había sido el primer profesor negro de Martinica y su abuela, en oposición a
muchas de las mujeres de su generación, sabía leer y escribir y enseñó a hacerlo a sus
nietos desde muy jóvenes.
Entre 1919 y 1924, Aimé Césaire cursa la escuela primaria su ciudad natal.
En 1924 obtiene una beca para ingresar en el liceo Victor Schœlcher en la capital de la isla.
En esta institución tiene como profesores a Gilbert Gratiant, figura influyente de la cultura
de Martinica, y a Octave Mannonni, autor de Psychologie de la colonisation (Psicología de
la colonización), texto que Césaire criticará más tarde en su Discurso sobre el colonialismo.
En septiembre de 1932 llega a París para ingresar la escuela preparatoria del liceo Louis-le-Grand,
dentro del programa literario (conocido popularmente en francés como hypokhâgne).
Comienza una amistad con Léopold Sedar Senghor, quien a la postre sería el primer presidente de Senegal independiente.
En 1934, junto con Sedar Senghor y Louis Gontran Damas, funda la revista L’Étudiant Noire
(‘El estudiante negro’). Colabora con ellos Suzanne Roussy, con quien contraerá matrimonio en 1937.
Es a través de este proyecto que Césaire empieza a utilizar el concepto de negritud