A pesar de los esfuerzos provenientes desde distintos ámbitos para atajarla, la delincuencia organizada transnacional es un fenómeno que ha ido creciendo en magnitud e importancia con el paso de las décadas. Así las cosas, resulta necesario plantearse, por un lado, qué nuevos mecanismos podrían adoptarse y, por otro lado, repensar la importancia y el alcance de los ya existentes para hacer frente a dicha amenaza.
La presente obra ofrece en su primer capítulo una posible respuesta acerca de lo que ha de entenderse por «delincuencia organizada transnacional». Posteriormente, dedica su segundo capítulo a presentar tanto una panorámica de su evolución como una sinopsis de sus rasgos actuales. Finalmente, en su tercer capítulo, analiza la declaración de los testigos en el proceso, para lo cual es necesario garantizar previamente su protección, como un mecanismo imprescindible para que las respectivas Administraciones de Justicia de los diferentes Estados puedan desarticular las organizaciones criminales operativas y, de ese modo, situarse más cerca de ganar aquello que se ha dado en llamar «lucha contra la delincuencia organizada».