Deontología ante las profesiones jurídicas
En esta obra se plasma, de una manera sencilla y asequible, ante los profesionales del Derecho, una visión actual de la ética jurídica que debe de presidir toda actuación judicial y jurisdiccional. Porque la deontología nunca puede estar ajena de la práctica profesional; es más, debe ser anterior a cualquier titulación que la configure.
Por eso, en este volumen –que no es un manual al uso– se recogen las vicisitudes profesionales del autor que, tanto como jurista en sus diferentes ámbitos, como estudioso del Derecho, ha experimentado para trasladarlo a estas páginas.
Todas estas profesiones están amparadas por sus respectivos Códigos Deontológicos que regulan –y comprometen– la actuación profesional y sirven para que la ética en la actuación diaria haga más eficaz a la justicia a través de una serie de valores que se enmarcan dentro de la ética, tales como la integridad, independencia, imparcialidad, transparencia, honradez, etc.
Bajo la salvaguardia, todos ellos, por la deontología profesional. Deontología ante las profesiones jurídicas.
Poeta y jurista natural de León (1935), aunque su vida profesional se ha desarrollado enteramente en el País Vasco, entre San Sebastián y Bilbao, desde 1960.
Licenciado y Doctor en Derecho, fue uno de los fundadores de la Escuela de Graduados Sociales de San Sebastián, institución en la que ejerció como director y profesor desde su creación hasta su integración en la Universidad del País Vasco. Es también Maestro de primera Enseñanza y Diplomado en Periodismo. Ha sido durante años magistrado del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, en Bilbao, institución de la que ha sido nombrado emérito, tras su jubilación. Ha ejercido como Profesor Asociado en la Universidad del País Vasco (Facultad de Derecho de San Sebastián) y en los Cursos Master de Universidad de Deusto (Bilbao).
En sus años de estudiante, formó parte del Teatro Universitario, representando obras de Casona, Lope de Vega, Edgar Neville y Alfonso Sastre, entre otros. En su ciudad natal, formó parte de la tertulia literaria leonesa «La Ceranda» y fue director de la revista universitaria Arco. Ya en los años sesenta del siglo XX participó en San Sebastián en las actividades culturales impulsadas por el Club Guipúzcoa, promotor de los Premios Guipúzcoa de literatura y de la editorial Agora, en la que se publicaron libros de muchos autores noveles guipuzcoanos. Los Premios Guipúzcoa se convocaron de 1967 a 1976, en las modalidades de poesía, novela, ensayo y teatro, abiertos a todos los escritores del mundo, tanto en castellano como en euskera. Este reconocimiento de las lenguas supuso una gran novedad en dicho periodo. Fue también concejal del ayuntamiento de San Sebastián en el periodo final del franquismo.
Isidoro Álvarez Sacristán, Magistrado emérito del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco
