Este librito cumple para el autor un doble propósito. Por un lado, referir algunos de sus recuerdos personales de una época de su vida, aquellos que perduran en su memoria. Por otro, engrosar el catálogo de los microrrelatos fantásticos y surrealistas. Todas estas historias se encuadran en lo que pudiéramos llamar narrativa hiperbreve, pues son muy breves los relatos que contiene.
Se trata de una mezcla de relatos de la vida cotidiana, estampas, cuadros costumbristas y otras narraciones de distinta naturaleza, con un fondo de realidad, mezcladas con historias irreales o fantásticas. Estas historias fantásticas están inmersas, en ocasiones, en un mundo científico, especialmente médico, que traduce la profesión del autor.
El microrrelato, subgénero literario muy de moda, se caracteriza por la hiperbrevedad y la narratividad, siendo también muy importante la elipsis, es decir, lo que se sugiere y se silencia, dando, por otra parte, una solución impactante al final del escrito. De todas maneras, no hay una definición concluyente del microrrelato, dejando total libertad al escritor en su estilo literario, que debe ajustarse a los objetivos de la narración.
Este pequeño compendio reúne 56 muestras de prosa hiperbreve, una selección de aquellas historias vividas que atesora la mente del escritor y también algunos microrrelatos fantásticos producto de sus ensoñaciones en los momentos de soledad.