La condición digital
La condición humana es ya condición digital. La aceleración de la digitalización durante la pandemia no ha hecho sino confirmar el camino hacia la digitalización de la vida que emprendimos en los primeros años de este siglo. Esta digitalización conduce a la alteración de las capacidades humanas que, según Hannah Arendt, no pueden modificarse sin cambiar también la condición humana. De hecho, la digitalización masiva de nuestras capacidades conduce no solo a la alteración de nuestra condición, sino a la propuesta político-tecnológica de una serie de tipos sobre-humanos que, en realidad, parecen ser contrarios a algunos de los elementos que habían ido definiendo la condición humana en el siglo XX.