Rentabilización de bienes públicos en tiempos de crisis: instrumentos urbanísticos y comparados
La satisfacción del interés público exige tratar de potenciar al máximo la rentabilización de los bienes de las Administraciones Públicas. En este sentido, la satisfacción del interés público se configura como el fin último y más elevado de la Administración, y al que deben quedar afectos todos los bienes integrantes de su patrimonio.
Ciertamente, la rentabilización de los bienes públicos implica la toma de conciencia del valor de los patrimonios públicos y la voluntad de racionalizar y rentabilizar su gestión para conseguir, de esta manera, una mayor eficacia en la prestación de los servicios y fines públicos, y, en definitiva, una mejor satisfacción del interés general.
La implantación de esta tendencia de valorización plantea grandes retos y dificultades, como la necesidad de conciliar la rentabilidad económica con la protección de los fines públicos y el interés general. Además, requiere un conocimiento exhaustivo del patrimonio público, una adecuada distribución de los bienes entre las diferentes administraciones y la adaptación de instrumentos jurídicos para permitir la coexistencia de propiedades públicas y privadas.