Educación financiera cambio paradigmas
En este Libro de Actas se recogen los trabajos de los ponentes participantes en el Cuarto Congreso de Edufinet “Educación financiera para una época de cambio de paradigmas”, celebrado del 17 al 19 de noviembre de 2021.
José Antonio Díaz Campos, Responsable del Área de Educación Financiera del Grupo Unicaja
El Proyecto Edufinet se inició en el seno de Unicaja hace ya más de 15 años, concretamente en el año 2005, con unos objetivos muy claros: transmitir conocimientos financieros a la población y fomentar la cultura financiera principalmente a través de tres líneas de actuación: la realización de actos presenciales, el mantenimiento y actualización de portales web con contenidos financieros y la edición de publicaciones.
A lo largo de estos más de 15 años, el Proyecto Edufinet, haciendo honor a su denominación de proyecto, sigue en construcción abarcando sin duda más colectivos, más canales y más contenidos que transmitir a la población. Y el proyecto sigue llevando a cabo su labor bajo los principios que lo inspiraron como son el altruismo y la participación activa.
Si tomamos como referencia la primera edición del Congreso, celebrada en noviembre de 2018, por aquel entonces el Proyecto Edufinet no retransmitía en streaming las actuaciones que llevaba a cabo.
Hoy día, el Proyecto Edufinet retransmite por sus redes sociales la gran mayoría de actividades que realiza, como es el caso de este congreso, que se está celebrando en formato híbrido con asistencia presencial y telemática.
Otro ejemplo de este proceso de construcción del Proyecto Edufinet es la ampliación de contenidos, que abarca la creación de subproyectos de educación financiera dentro del Proyecto Edufinet. Por citar algunos, podemos hablar de EdufiTech, subproyecto dedicado exclusivamente a las nuevas tecnologías aplicadas a las finanzas, o más recientemente ha tenido lugar la puesta en marcha de otro subproyecto de educación financiera y deporte que recibe el nombre de EdufiSport.
Pero lo más importante para un proyecto de educación financiera no son solo los contenidos o los canales que utiliza para transmitirlos, sino también los beneficiarios a los que llega. A día de hoy, han participado más de 180.000 personas en las distintas jornadas, talleres, cursos, congresos y conferencias organizadas por el Proyecto Edufinet.
La educación financiera a día de hoy es una cuestión de suma importancia, no sólo por suponer un pilar de estabilidad del sistema financiero, junto con la regulación y la supervisión, sino también porque se ha constatado que una mejora en los niveles de educación financiera puede suponer una diferencia importante en la vida de las personas.
Y esto es así porque la educación financiera posibilita que las personas tomen decisiones financieras responsables lo que redunda en una mejora en este proceso. Y esto a su vez se traduce en una mayor estabilidad del sistema, con efectos positivos sobre la sociedad en general.
Por último, no quisiera terminar sin antes hacer una breve mención al Congreso de Educación Financiera que hoy se inaugura. En primer lugar, hablando de los objetivos del mismo que son tratar de discernir el estado de la cuestión en este ámbito; servir de punto de encuentro entre los diferentes agentes involucrados o interesados en la educación financiera; analizar la situación actual de la educación financiera para identificar tendencias y puntos de interés, y poner en común conocimientos y experiencias.
En base a estos objetivos, se ha elaborado un completo programa compuesto por 14 ponencias y 4 coloquios en los que se abordarán los siguientes temas:
1. El (re)diseño permanente de los programas de educación financiera.
2. El papel de la educación financiera: 2021-2030.
3. El acceso a los servicios financieros por los menores de edad como vía de aprendizaje.
4. Modelos de negocio sostenible para emprendedores.
5. El análisis económico como prerrequisito en la toma de decisiones financieras.
6. Las nuevas formas de tributación y la toma de decisiones financieras.
7. Decisiones económicas y financieras de pymes y particulares en el actual contexto energético.
8. La Agenda 2030, los ODS y la educación financiera.
9. Acicates, regulación y contratación financiera.
10. La enseñanza de nociones económicas y financieras elementales en el ámbito doméstico y familiar.
11. Las competencias financieras básicas que debe manejar un deportista profesional.
12. “Machine learning”, inteligencia artificial y educación financiera.
13. Competencias en economía y finanzas para funcionarios.
14. La educación financiera y su vinculación con las entidades financieras y no financieras.
15. La evaluación de la eficacia de un programa de educación financiera.
16. El impacto de las medidas de política monetaria en la toma de decisiones financieras por los particulares y empresas.
17. Habilidades de cálculo básicas para la educación financiera.
18. Ciberdelito, fraude y ciudadanía. Perspectiva de Policía Nacional.
Sergio Corral Delgado, Director General de la Fundación Bancaria Unicaja
El IV Congreso de Educación Financiera del Proyecto Edufinet se ha ido afianzando en los últimos años creciendo en paralelo al conjunto de la iniciativa y afirmándose como una de las citas ineludibles para evaluar todo lo referente al área de formación en economía. Una materia capital para el progreso y el funcionamiento del país que demanda actualización continua además de nuevas estrategias y más en un entorno tan cambiante como el que nos rodea sometido a tensiones inesperadas y a desafíos que exigen una respuesta cabal e inmediata tanto en el ámbito de los hogares como en el de la vida pública.
En primer lugar me dirijo a los colaboradores directos del Proyecto Edufinet que se empezó a desarrollar en el año 2005 y que se ha convertido en uno de nuestros emblemas ocupando una posición de vanguardia desde sus inicios que precedieron incluso al Plan de Educación Financiera impulsado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores y el Banco de España. Una condición pionera que se ha visto acompañada a lo largo del tiempo por una vocación deliberadamente integradora y por un espíritu inconformista que en ningún momento ha dado la espalda a la realidad ponderando cada avance con la debida cautela y enunciando permanentemente nuevas inquietudes. Todo ello, con un objetivo claro que tiene su norte en la inclusión, en la necesidad de distanciarnos progresivamente del alarmante punto de partida: la falta de conocimientos básicos de economía por parte de un sector todavía abultado de la población.
Buena prueba de la salud y de la ambición del proyecto, además de su compromiso y sus conquistas intelectuales es el contenido de este congreso, que consta de catorce sesiones y cuatro mesas redondas con una treintena de ponentes, procedentes de un gran número de instituciones como el Banco de España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores, CECA, Policía Nacional, universidades como la de Málaga, Sevilla, de Buckingham, despachos de abogados, representantes del tejido empresarial, con una divisa, en sí misma, que es una declaración de intenciones: la necesidad de adaptar la educación financiera a los desafíos que se han ido acumulando a partir de la crisis sanitaria, que engloban cuestiones perentorias para el funcionamiento de la sociedad como la digitalización de la economía, el trabajo en remoto, la incorporación de la inteligencia artificial a los procesos productivos, la sostenibilidad, el suministro de energía limpia o la aparición de nuevas monedas.
Asuntos que lejos de significar una tendencia, han penetrado de lleno en la actualidad, obligándonos, al igual que la pasada crisis económica, a reaccionar con rapidez y diligencia, trasladándolos a la agenda de la formación con el objetivo de ayudar a la ciudadanía a desenvolverse con garantías y de manera documentada en el mapa de sus decisiones cotidianas. Una labor que no es ni mucho menos complementaria o anecdótica ya que en el campo de la economía la variable de la formación es indisociable del progreso y del bienestar, cuando no de frontera que separa el crecimiento de la exclusión y la vulnerabilidad. De ahí que cada vez más organismos internacionales consideren la educación financiera como prioritaria, situándola entre los indicadores básicos que miden el desarrollo, incluso en publicaciones de tanto recorrido como el informe PISA de la OCDE, que lo añadió en 2012 en su lista de parámetros básicos a analizar y que apunta, por cierto, a cifras todavía preocupantes para España a la que ubica por debajo de la media en cuanto a habilidades interpretativas de los jóvenes de 15 años, precisando que 1 de cada 4 alumnos apenas alcanza una asimilación elemental, algo que tampoco ofrece dato más alentadores en el caso de los adultos.
Hablamos de habilidades que comprenden desde la familiaridad con los productos financieros a la comprensión en detalle en el caso de los más jóvenes de una factura de la compra y cuyo escaso manejo ha sido sancionado con preocupación por multitud de instituciones y abordado en numerosos foros y estudios como los anteriormente referidos. Ejemplos todos del aumento de la concienciación en lo que respecta al Proyecto Edufinet ha ido sumando ciclos, involucrando cada vez a más instituciones y universidades e incrementando significativamente el alcance de sus iniciativas, que en los últimos años han doblado su apuesta con las nuevas tecnologías, alumbrando herramientas imaginativas como el videojuego presentado el pasado año sin olvidar, por supuesto, nuestra Olimpiada Financiera que lleva ya doce ediciones.
Cifras y proyectos que evidencian el crecimiento y la magnitud del proyecto, dirigido como saben a numerosas capas de formación entre las que ha sido clave para extender la formación financiera. Con un trabajo modélico y ajeno a cualquier atisbo de autocomplacencia, entre otras razones por la importancia de su labor y por el camino que queda por recorrer, que todavía, pese a la mejora, sigue siendo basto y exigente y más si se confronta con los cambios que se están sucediendo en la economía a escala global, que tienen una incidencia directa en la planificación y en la estabilidad financiera de las familias y, por tanto, también del conjunto de la sociedad.
El reto, como decía, es amplio y fascinante, especialmente si se tiene en cuenta la relación entre el nivel de conocimientos y la prosperidad. Un vínculo que se manifiesta día a día y que cada vez resulta más imperiosamente indefectible, haciendo que la formación en economía adquiera una relevancia capital para el mantenimiento del sistema y la generación de riqueza, reclamando un lugar destacado en la programación curricular.
José María de la Vega Carnicero, Director General de Recursos Humanos, Talento y Cultura de Unicaja Banco
La situación sanitaria permite por fin que esta IV edición del Congreso, a pesar de las dificultades y con todas las cautelas, se pueda celebrar no sólo de manera telemática, como se hizo en la edición del pasado año, sino también de manera presencial lo que ya representa en sí mismo un motivo de satisfacción.
Una satisfacción que crece cuando el motivo es además el desarrollo de iniciativas de educación financiera y se convierte en un encuentro que suma a los asistentes los congresistas que seguirán las diversas sesiones en formato on-line, desde prácticamente todos los puntos de España.
Como seguramente sabrán, a lo largo de todos estos años Unicaja Banco ha venido apoyando y dando soporte a Edufinet, un proyecto que arrancó en el tiempo hace más de 15 años, en el que igualmente participan un buen número de instituciones públicas y privadas. Nuestra entidad, como parte de su Responsabilidad Social Corporativa, está firmemente convencida de los efectos beneficiosos de la educación en general y de la educación financiera en especial, dado que en este último caso, las acciones desarrolladas se orientan a mejorar las competencias económicas y financieras de las personas pero con un matiz no menor y es que son competencias que pueden mejorar la sociedad, a través de un conocimiento práctico y útil para las personas y las familias en su vida cotidiana.
Nos sentimos muy orgullosos y agradecidos de que sean empleados de Unicaja Banco una parte significativa de los voluntarios que desarrollan de forma totalmente desinteresada y altruista estas acciones de educación financiera de Edufinet, dirigidas a los más variados colectivos, desde los alumnos de primaria o secundaria, a las personas mayores pasando por los estudiantes y profesores universitarios, sin olvidar colectivos vulnerables o que deben superar determinadas dificultades en su día a día.
Aprovecho este momento para recordar y agradecer el premio obtenido por Edufinet hace apenas unos meses en el marco de los premios Ceca de Obra Social y Educación Financiera 2019-2020. La iniciativa premiada tuvo por objeto, precisamente, que los formadores de Edufinet ampliaran sus conocimientos y mejoraran sus habilidades como docentes en materia de economía y finanzas con el respaldo de instituciones académicas y certificadoras de reconocido prestigio.
Para Unicaja Banco y para Edufinet por extensión, también está siendo clave el apoyo prestado en los últimos años por Funcas, que quiero destacar expresamente. Hasta ahora han sido tres los convenios suscritos por ambas instituciones en el marco del Programa Funcas de Estímulo a la Educación Financiera. El último de ellos se formalizó a finales de 2020 y está siendo extraordinariamente útil para ampliar el abanico de actividades, su profundidad y su difusión.
Quiero poner en valor que hoy día la educación financiera se concibe como uno de los ejes de la estabilidad del sistema financiero, conjuntamente con la supervisión y con la regulación. Si a ello le sumamos el componente de responsabilidad social anteriormente mencionado con el que Unicaja Banco está totalmente alineado, no podemos dejar de expresar nuestro pleno apoyo a la educación financiera y a Edufinet, como vías para hacer efectivo el principio de inclusión financiera para todos.