La obra aborda el binomio oportunidad desafío que conlleva el empleo de las más modernas tecnologías en los centros penitenciarios. El autor parte de la premisa que entiende la imparable y ambivalente transformación digital, que llegará más temprano que tarde a nuestras prisiones, centrando su atención en los interrogantes relativos a la determinación de qué técnica, para qué fines y, lo más importante, el cómo implementarlas y delimitarlas con pleno respeto a los derechos de los reclusos.
El lector se encuentra ante un trabajo de investigación que explora los usos plausibles de los sistemas de inteligencia artificial en la fase de ejecución penal, que parte de un análisis minucioso de las fortalezas y debilidades de un sistema penitenciario que proyecta aún disonancias fruto de la dicotomía entre teoría y práctica y de la latente pulsión al castigo y retribución de nuestro modelo, ahora dominado por los sistemas actuariales y la necesidad de actuar ex ante delictum, frente a los parcialmente denostados fines constitucionales de reinserción y reeducación.
La monografía cuenta con el prólogo, proemio y epílogo de voces contrastadas como las de Esteban Mestre Delgado, Bernardo Feijoo Sánchez y Antonio Andrés Pueyo, que respectivamente, y como reacción a la lectura de esta, entablan un debate con las ideas del autor, elevando en definitiva el nivel de la obra, y sentando las bases para una discusión futura a la que se anima expresamente a participar a los operadores jurídicos y a la doctrina científica más especializada.