Días de luces y cactus surge de una mirada hacia el mundo que nos rodea. En sus diecisiete relatos, fantasía y realidad se alternan y conviven —sin que a veces sea sencillo distinguir la una de la otra—, adentrándose
en la vida de sus protagonistas (riders, sopladores de hojas, adolescentes, inmigrantes…) que muestran su confusión y desamparo ante un mundo áspero, siempre a punto de desmoronarse. Sin embargo, incluso de las
heridas puede brotar la luz.